Neumonía (inflamación del tracto respiratorio) en gatos

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Inflamación del tracto respiratorio (neumonía) causada por la inhalación de gases extraños en gatos

La neumonía por aspiración es una enfermedad en la que los pulmones de un gato se inflaman por la inhalación de gases extraños, por los vómitos o por el reflujo del ácido estomacal elevado. Esta es una neumonía que también puede ser causada directamente por un trastorno neuromuscular que dificulta la deglución, así como por problemas relacionados con el esófago, que pueden provocar parálisis del esófago.

Otras causas de disfunción pulmonar pueden ser un bloqueo de las vías respiratorias o la inhalación de ácido del estómago, que puede causar un daño extenso a los tejidos internos de los pulmones. Las bacterias presentes en materias extrañas inhaladas también pueden causar infección.
Las infecciones del tracto respiratorio son más comunes en perros que en gatos. Si está interesado en conocer los efectos de esta enfermedad en los perros, visite esta página .

Síntomas y clasificación.

Los síntomas de una infección respiratoria incluyen dificultad para respirar, dificultad para tragar, tos, fiebre, secreción nasal, respiración rápida, palpitaciones del corazón, piel pálida (palidez) e incapacidad para hacer ejercicio debido a la debilidad muscular del cuerpo. Los cambios de humor, la pérdida de apetito, los vómitos y el posible reflujo también pueden ser síntomas de esta enfermedad, dependiendo de la causa subyacente.

Razón

Las principales causas de las infecciones del tracto respiratorio incluyen anomalías relacionadas con la faringitis y trastornos neuromusculares, que afectan tanto a los nervios como a los músculos.

El agrandamiento de la parte inferior del esófago en los gatos (debido al reflujo ácido) o un esófago colocado incorrectamente también pueden provocar inflamación de las vías respiratorias.

Diagnosticar

Su veterinario realizará un examen físico completo utilizando herramientas de diagnóstico por imágenes y audio para obtener una imagen completa de la condición pulmonar de su gato. También se pueden realizar otras pruebas, como palpación del abdomen, radiografía de tórax, análisis de sangre general, incluida la química sanguínea y hemograma completo.

Los análisis de sangre mostrarán infecciones y una radiografía de tórax mostrará inflamación de las vías respiratorias. Puede ser necesario tomar una muestra de líquido de los pulmones para determinar si hay bacterias presentes y, de ser así, ayudará a determinar qué antibióticos serán efectivos para tratar a su gato.

Si su gato tiene dificultad respiratoria, su veterinario puede ordenar un análisis de gases en sangre. Esta es una prueba para medir los niveles de oxígeno y dióxido de carbono en la sangre.

Su veterinario también puede ordenar un examen de la actividad de deglución de su gato para determinar si el gato tiene disfunción esofágica. También se puede realizar una radiografía endoscópica con fluoresceína, llamada fluoroscopia endoscópica, para evaluar más a fondo los músculos del esófago y su capacidad para mover los alimentos hacia el estómago.

Tratamiento

La aspiración respiratoria se puede realizar inmediatamente después de que el gato haya inhalado el gas extraño. Si su gato muestra signos de insuficiencia respiratoria, la oxigenación debe realizarse como parte del tratamiento para estabilizar los síntomas. Si hay signos de deshidratación o shock, o si el gato no bebe agua por la boca, se pueden administrar líquidos por vía intravenosa. Una vez que se han abordado los síntomas principales, se debe reintroducir al gato al agua potable, especialmente cuando tiene una enfermedad respiratoria aguda.

Tu gato debe descansar en un lugar tranquilo, preferiblemente en una jaula, alejado de otros animales o donde estén jugando los niños. Sin embargo, todavía es necesario vigilarlos de cerca. Cuando un gato tiene esta enfermedad, no se debe dejar inmóvil más de dos horas, para evitar el riesgo de acumulación de líquido en un solo lugar. Debe cambiar la posición del gato de forma continua a lo largo del día.

Una vez que su gato muestra signos de calmarse, el ejercicio suave puede ser útil para desencadenar la tos y ayudar a despejar las vías respiratorias. Si el gato se recupera lentamente, se pueden usar gotas de solución salina.

Viviendo y cuidando

La infección del tracto respiratorio es una enfermedad grave que puede poner en peligro la vida. Es posible que su gato necesite cuidados intensivos durante unos días antes de que se calme por completo. En algunos casos, si esta enfermedad provoca complicaciones con parálisis del esófago, será más difícil para el gato recuperarse por completo. Una vez que la enfermedad de su gato se haya estabilizado, deberá continuar con el ciclo completo de medicación, así como con las medidas de control que su veterinario considere necesarias.