Disección de osteoartritis (TOC) en perros

3451

Exceso de cartílago y falta de crecimiento óseo en perros.

La formación de cartílago óseo es el proceso de crecimiento óseo, en el que el cartílago es reemplazado por hueso durante las primeras etapas del desarrollo fetal. La osteoartritis es una afección en la que se interrumpe la formación de hueso a partir del cartílago. El trastorno generalmente es causado por una interrupción en el suministro de sangre a los huesos. Esto conduce a una retención excesiva de cartílago ya que se detiene la formación de hueso a partir del cartílago, mientras que el cartílago continúa creciendo. El resultado final son áreas de cartílago anormalmente densas que son menos susceptibles a la tensión mecánica, a diferencia de huesos más fuertes y densos.

Las razas grandes, incluidos los grandes daneses, los perros perdigueros de labrador, los terranovas, los rottweilers, los perros de montaña de Berna, los perros sette ingleses y los pastores ingleses son susceptibles a esta enfermedad.

Síntomas y formas de enfermedad.

  • Cojear (síntoma más común)
  • La aparición de una cojera puede ser repentina o gradual, incluyendo una o más piernas.
  • Más flácido después del ejercicio
  • No puedo poner peso sobre la pierna enferma
  • Inflamación de articulaciones
  • Dolor en las piernas, especialmente al usar articulaciones.
  • Atrofia muscular por cojera prolongada

Razón

  • Desconocido
  • Factores genéticos
  • Interrupción del suministro de sangre a los huesos o a través de ellos
  • Deficiencias nutricionales

Diagnosticar

Deberá proporcionarle a su veterinario el registro de salud de su perro, la aparición de los síntomas y la información sobre los padres de los perros que tiene. Su médico realizará pruebas, que incluyen una prueba de química sanguínea, un hemograma completo y un análisis de orina. Los resultados de estas pruebas suelen estar dentro del rango normal en perros enfermos, pero son necesarios para suposiciones preliminares sobre la salud general del perro.

Su veterinario examinará a fondo a su perro, prestando especial atención a las patas que le dificultan caminar. Los rayos X son la mejor herramienta para diagnosticar este problema; Su médico tomará radiografías de las articulaciones y huesos afectados para distinguir otras anomalías. Las radiografías pueden mostrar detalles de las lesiones y anomalías asociadas con esta enfermedad. La tomografía computarizada (TC) y la resonancia magnética (RM) también son herramientas de diagnóstico valiosas para visualizar la extensión del daño interno.

El médico también tomará una muestra de líquido de las articulaciones afectadas (líquido sinovial) para confirmar la articulación enferma y descartar una enfermedad infecciosa que pueda ser la causa real de la enfermedad. Se pueden utilizar herramientas diagnósticas y terapéuticas más avanzadas, como la artroscopia. La artroscopia es un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo que permite el examen y, a veces, el tratamiento del daño dentro de la articulación. Este procedimiento se realiza mediante un artroscopio, un endoscopio que se inserta en la articulación a través de una pequeña incisión.

Tratamiento

Una vez establecido el diagnóstico, el médico planificará una cirugía ortopédica. Se puede usar una artroscopia o artroscopia (cirugía para hacer una incisión en la articulación) para acceder al área. Su médico le recetará medicamentos para controlar el dolor y la inflamación durante unos días después de la cirugía.

También existen algunos medicamentos que ayudan a limitar el daño y la degeneración del cartílago. Su médico le explicará sus opciones según su diagnóstico final.

Cuidar de

Durante el período de recuperación y curación, se debe limitar la actividad y tomar medidas de control de peso para reducir la presión sobre las articulaciones afectadas. Cuando saque a su perro a pasear, controle el nivel de actividad con la correa, asegurándose de que el perro siga caminando lentamente. La actividad debe limitarse durante aproximadamente cuatro a seis semanas, pero después de eso, se recomienda la actividad de la articulación afectada para mejorar la curación.

No debe dejar que su perro corra libremente sobre concreto o superficies duras. Se recomienda un cribado anual para prevenir la progresión de la enfermedad degenerativa de las articulaciones. La nutrición equilibrada también es un aspecto importante para promover un crecimiento rápido y mantener el peso dentro del rango normal para la raza, la edad y el tamaño del perro. El control de peso también ayudará a reducir la carga en las articulaciones afectadas.

El pronóstico general depende en gran medida de la ubicación y extensión de la enfermedad. En algunos casos, el perro se recuperará y vivirá bien, mientras que en otros casos la calidad de vida será limitada. Debido a que la enfermedad tiene un factor genético, es necesario castrar o castrar al perro para evitar la transmisión de la enfermedad a la siguiente generación.