Poliuria y bulimia en perros

4472

Consumo excesivo de alcohol y poliuria en perros

El consumo excesivo de alcohol se refiere a un mayor nivel de sed en los perros, mientras que la poliuria se refiere a la excreción de cantidades anormalmente altas de orina. Aunque rara vez causa consecuencias graves, se debe revisar a su mascota para asegurarse de que la afección no sea un síntoma de una afección médica subyacente más grave. Su veterinario querrá confirmar o descartar la enfermedad. ERC, o enfermedad sobre hígado.

La poliuria y la bulimia pueden afectar tanto a perros como a gatos, y son causadas por muchos factores. Si quieres conocer los efectos de esta enfermedad en los gatos, visita esta página.

Síntomas de poliuria y bulimia en perros.

El síntoma más común de esta enfermedad es una mayor frecuencia de micción y el perro bebe mucha más agua de lo habitual. Por lo general, no hay cambios en el comportamiento del perro.

Causas de poliuria y bulimia en perros

Las principales causas de poliuria y bulimia son anomalías congénitas y las causas están relacionadas con la insuficiencia renal. Las enfermedades congénitas pueden incluir diabetes, insuficiencia suprarrenal de esteroides y algunos trastornos psicológicos raros. La enfermedad renal puede ser congénita o estar asociada con tumores, aumento de la producción de esteroides, aumento de los niveles de hormona tiroidea y alteraciones electrolíticas u hormonales.

Otros posibles factores desencadenantes del consumo excesivo de alcohol y la poliuria son una dieta baja en proteínas, los medicamentos recetados para eliminar el exceso de líquido del cuerpo (diuréticos) y la edad. Los perros más pequeños y activos tienen más probabilidades de tener cada vez más sed y orinar constantemente.

Diagnóstico de poliuria y bulimia en perros.

Su veterinario examinará a su perro para determinar su nivel exacto de sed y micción midiendo la cantidad de agua que bebe y la cantidad de orina que produce. Se establecerá una línea de base de los niveles normales de líquidos (hidratación) y la producción de orina normal para comparar, y la evaluación para garantizar un aumento de la sed y la micción no son indicativos de una enfermedad más grave.

Las pruebas estándar incluirán un hemograma completo (CBC), análisis de orina y radiografías para descartar o confirmar cualquier problema con los sistemas renal, suprarrenal y reproductivo.

Cualquier otro síntoma relacionado con un aumento de la sed o de la micción, incluso cuando hay síntomas no relacionados, debe considerarse en el diagnóstico final.
Tratamiento de la bulimia y la poliuria en perros.

Los perros pueden tratarse de forma ambulatoria. La principal preocupación es que la insuficiencia renal o hepática puede provocar un aumento del consumo de agua o de la micción. Si se descartan ambas preocupaciones y no hay otras afecciones graves asociadas con ellas, no es necesario ningún cambio de comportamiento o tratamiento.

Su médico puede establecer un límite de agua y advertirle que lo controle para que su perro esté bien hidratado. Los niveles de líquidos deben controlarse durante y después del tratamiento, ya que la deshidratación también puede causar complicaciones graves. Si su perro está deshidratado, su médico también puede recetarle electrolitos.

Viviendo y controlando

Se recomienda observar y comparar con el nivel de referencia que se ha establecido para juzgar la recuperación.

Prevención de la bulimia y la poliuria en perros.

Actualmente, no existe cura para la bulimia y la poliuria.